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El modo de vida actual o los horarios de trabajo, no siempre permiten acudir a los pequeños establecimientos, donde el cliente adquiere total confianza en el tendero, puesto que éste busca satisfacer a cada uno de ellos y de forma individualizada, logrando así unos lazos estrechos que, en numerosas ocasiones, se transmiten de generación en generación.

Para evitar la pérdida de clientes, resulta totalmente imprescindible renovarse. Y esto es lo que han hecho en la carnicería Otzarreta de Tolosa. Para ello han habilitado una máquina de vending, que al igual que ya lo hicieran en otras localidades con pescado, en este caso contiene todos los productos que se venden en el propio establecimiento. Por supuesto, con la misma calidad y con todas las medidas de higiene y seguridad que deben de pasar todos los alimentos que venden, tanto en la carnicería como en la máquina.

Una idea de Francia
Jon Ander Aizpurua es uno de los empleados de la carnicería tolosarra, asegura que la idea nace porque “vimos que en Francia se vendía mucha comida preparada en este tipo de máquinas las 24 horas del día y pensamos que sería bueno hacer algo parecido. Así fue como surgió esta idea”.

Para ello buscaron una máquina que se adaptara al lugar con el que contaban. “Estamos expectantes por saber cómo funcionará. De momento lo cierto es que está teniendo muy buena acogida y si sigue así, como tenemos más carnicerías en otras localidades como Azkoitia, Zarautz, Zumaia… “.

Una buena acogida de la que se sienten incluso sorprendidos. “No pensábamos que su difusión fuera tan rápida, especialmente porque nuestra clientela es más de comprar de forma tradicional y no en máquinas o por Internet”.

Una de las cosas que más le sorprenden a Jon Ander es la hora a la que se adquieren ciertos productos. “A altas horas de la madrugada. Pero ya nos dijo uno de nuestros clientes que la máquina le había venido muy bien, porque de esa forma se llevada la comida precocinada a la fábrica y no tenía que molestarse en prepararla en casa. Además, como le gustaba mucho, se lo había comentado a sus compañeros de trabajo. Así que esperemos que para este tipo de clientes se convierta en una costumbre”.

Qué comprar
Una de las ventajas que tienen estas máquinas es que puedes ver el producto que compras, a diferencia de cuando se adquieren por Internet. Y todo ello, con la total garantía “de que es exactamente el mismo producto que vendemos en la tienda. Cada uno de los elementos que el cliente compre lleva su fecha de caducidad y las indicaciones alimentarias necesarias”.

Así que todo aquel que lo desee y con total seguridad, puede comprar todo tipo de carnes, embutidos y comida precocinada: “entrecot, salchichas caseras, callos preparados, ensaladillas, albóndigas….todo producto casero”. Normalmente, los productos se venden en raciones para 1 ó 2 personas.

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